Cargando..
Dejen de juzgar, para que no sean juzgados (Mat. 7:1).
Lucas expresó las palabras de Jesús de este modo: “Dejen de juzgar, y de ninguna manera serán juzgados; y dejen de condenar, y de ninguna manera serán condenados. Sigan poniendo en libertad, y se les pondrá en libertad” (Luc. 6:37). Los fariseos juzgaban a la gente con dureza basándose en tradiciones contrarias a las Escrituras. A todos los que tenían esa costumbre, Jesús les estaba diciendo que ‘dejaran de juzgar’ a los demás y que, en vez de eso, los ‘pusieran en libertad’ o los liberaran de sus culpas; en otras palabras, que les perdonaran sus faltas. El apóstol Pablo dio un consejo parecido sobre el perdón (Efe. 4:32). Si los discípulos de Jesús perdonaban a otras personas, estas se sentirían impulsadas a responder de igual modo. “Con el juicio con que ustedes juzgan, serán juzgados; y con la medida con que miden, se les medirá”, dijo Jesús (Mat. 7:2). En el campo de las relaciones humanas, se cosecha lo que se siembra (Gál. 6:7). w08 15/5 2:13, 14
0 comentarios:
Publicar un comentario