Cargando..
Mantengan abiertos los ojos y guárdense de toda suerte de codicia, porque hasta cuando uno tiene en abundancia, su vida no resulta de las cosas que posee (Luc. 12:15).
Puede que nuestro jefe nos ofrezca un ascenso con un sueldo más alto y otros beneficios. O tal vez se nos presente la posibilidad de mudarnos a otro país o región para conseguir un trabajo mejor pagado. Al principio, tales oportunidades pudieran parecer una bendición de Jehová. Pero antes de decidirnos, preguntémonos qué desea realmente nuestro corazón. Lo que más debe importarnos es el efecto que dicha decisión tendrá en nuestra relación con Jehová. El mundo de Satanás promueve incesantemente el materialismo (1 Juan 2:15, 16). Como el objetivo del Diablo es corrompernos, tenemos que estar alerta para detectar y eliminar cualquier deseo materialista que haya echado raíces en nuestro corazón (Rev. 3:15-17). Si somos leales, confiaremos en Jehová y no en nosotros mismos. w08 15/8 2:6, 7
0 comentarios:
Publicar un comentario